Se me ha pedido contarles parte de esta aventura scout que inició en el 2016 en que convencido de que el Colegio Capellán Pascal era el mejor espacio para desarrollar el escultismo en beneficio de todos los estudiantes que pasaron y pasan por sus aulas.
“La metodología scout de educación permitiría satisfacer, las inquietudes e intereses de los alumnos, el empeño de los padres de proporcionar actividades adecuadas para sus hijos en los tiempos extra colegio y una continuidad al acompañamiento actitudinal de aquellos alumnos que requieren de un trabajo de más largo aliento y que requieren de refuerzos que exceden lo posible en los tiempos de colegio.
La metodología de educación y la disciplina scout generan adhesión a un estilo de vivir y de hacer las cosas que redunda, ayudado por un buen soporte y contexto familiar, necesariamente en una persona mejor, preocupada de su entorno y de aquellos que la rodean, atenta a las necesidades de los demás, con habilidades para el trabajo en equipo y liderazgo adecuado a su edad y contexto. Desarrolla la capacidad de dar la opinión personal y la capacidad de alejarse de aquello que pueda ser causa de daño personal o colectivo. La disciplina scout asumida como el orden necesario para realizar bien aquello que es necesario, en compañía de adultos cuyo requisito primero y esencial es la de constituirse en ejemplos de vida, genera una adecuada capacidad de reconocer su rol dentro de una comunidad de personas con ideales similares.” (citado de la versión original del Proyecto presentado al Colegio Capellán Pascal en octubre de 2016)
Con esta declaración de principios e intenciones iniciaba la aventura del Grupo de Guías y Scouts Arturo Prat Chacón con el objetivo claro de “Generar un espacio educativo que permita la vivencia y adhesión a los principios y valores del Movimiento Scout, los que a su vez están declarados en el Proyecto Educativo Institucional del Colegio Capellán Pascal, a través de la vivencia del Método Scout.” Nada habría sido posible sin la confianza y apoyo que brindó el Rector de ese entonces Don Eduardo Troncoso.
Durante los meses que siguieron a la firma del convenio de patrocinio el equipo de futuros dirigentes se dedicó a conocer el Colegio y su ideario educativo para poder proporcionar la continuidad al trabajo que se hacía en sus aulas, se reparó la gruta de la virgen que se encontraba en precarias condiciones, se limpió y decoró la casa scout, se limpió el entorno que sería ocupado por los futuros beneficiarios y se instalaron los mástiles para poder izar en forma digna el Pabellón Nacional y las banderas que representaban a las unidades del grupo.
En febrero de 2017 se realizó el primer campamento de dirigentes en el Club de huasos de Olmué, lugar en el que se pudo desarrollar el primer campamento de grupo los días 29 y 30 de marzo de ese año. La primera reunión de día sábado fue el día 04 de marzo. Ese día esperábamos la respuesta de algunos niños y niñas interesadas, pero quedamos sorprendidos cuando llegaron más de 80 beneficiarios con sus padres para dar inicio a la aventura Arturo Prat.
Ese día sábado 04 de marzo de 2017 debutó el primer equipo de dirigentes que tuvo como responsable de la Unidad de Bandada, la Señorita Fiorella Hernández Vargas, Asistente señorita Damarys Moreno Moreno. Responsable de la Unidad de Manada, la Señora Claudia Silva Olivares, asistentes: la Señorita Johanna Lagos Catalán, el Señor Benjamín Fernández Villavicencio, la Señorita Ximena Silva Oyarzo y el Sr. Mario Maturana Olave. Responsable de la Unidad de Compañía la Señora Camila López. Responsable de la Unidad de Tropa, el Señor Germán Letelier Concha, asistentes: el Señor Sebastián Olguín y el Señor Rodrigo Arancibia Vera. Responsable de la Unidad de Avanzada de Pioneros, el Señor Emilio Ponce Sandoval y otros más que se incorporaron durante ese primer año de vida. La responsabilidad de la jefatura de Grupo estuvo encomendada al Sr. Emilio Ponce Sandoval. A todos ellos nuestra más profunda gratitud por el cariño, tiempo y empeño entregado a esos niños y niñas de los cuales algunos, muy pocos, valientes y generosos son ahora dirigentes.
El primer campamento de verano se realizó en la Isla Quiriquina entre el 05 y el 15 de enero de 2018 y contamos con el invaluable apoyo de la Armada de Chile quien nos ofreció todos los apoyos logísticos disponibles en la isla. ¡Esa aventura fue increíble, llena de recuerdos imborrables!
Después vinieron otros muchos campamentos y aventuras, los números de integrantes ha sufrido altas y bajas, propias de cualquier voluntariado, pero seguimos en la convicción que, el nuestro es un extraordinario servicio a la Patria en tiempos de paz. Llevamos en nuestro cuello los colores de su Emblema, tenemos el nombre de uno de los más grandes héroes que ha dado este bello suelo y seguimos su ejemplo de entrega, abnegación y servicio a Chile.
En toda esta aventura la presencia de Dios y de la Virgen María siempre ha sido una presencia que hemos sentido, en especial en los campamentos, cuando miramos el cielo estrellado, en el silencio de la noche, junto a una fogata, un té o un buen mate calentito que nos recuerda que somos hermanos de un mismo Padre que nos ama y nos cubre con su manto de estrellas.
Hoy seguimos en la senda, nuestro paso sigue firme, hemos sufrido transformaciones que nos han permitido sortear las dificultades, pero la fraternidad y la camaradería siguen siendo pilares fundamentales en el empeño de ser “siempre mejores” para estar “siempre listos” en el “servir” a nuestro prójimo en toda circunstancia y vivir fielmente la Ley Scout.
Mi gratitud a todos mis hermanos y hermanas scout que han pasado y están en el Grupo Arturo Prat, a todos ellos llevo en mi corazón y pido para que su generosidad sea retribuida por el Buen Dios.
En la hermandad Scout
¡BUENA CAZA!
